Capítulo 21. "¿Y la rutina continúa ?"
-Escucha bien hada amarilla entiendo que aunque yo les diga que no voy a revelar sus secretos no me creerán sin embargo mantenerme aquí para asegurar eso no es una buena opción sino regreso a la escuela es muy probable que las profesoras que son brujas de alto nivel empiecen a buscarme. Estoy segura que podrán evitar que me encuentren por un tiempo pero eventualmente ellas me encontrarán. En resumen la situación solo empeorará. Lo mejor será que me dejen regresar a mi vida normal, estoy de acuerdo con que me vigilen continuamente para asegurarse que no revelaré sus secretos. Tú puedes acompañarme en secreto o incluso de forma abierta, si alguien me pregunta diré que eres mi familiar así no debería haber problemas. Cuando la reyna despierte ella sabrá que hacer-.
-¿Puedo pensarlo… un poco?- Tras escuchar la proposición de Inés la pequeña hada amarilla terminó considerando que lo que Inés decía tenía mucho sentido sin embargo no era sencillo tomar una decisión.
-Adelante pero ten en cuenta que cuanto mas tiempo tarde aquí mas sospecharán allá afuera-.
La hada amarilla se dio la vuelta y regresó con las otras a discutir la situación tras casi media hora volvió con Inés.
-Fue muy difícil convencerlas pero aceptamos tu proposición por el momento te dejaremos ir pero para asegurarnos que no hables te acompañaré en secreto, dame unos momentos para empacar mis cosas.
-Ok.
Inés no esperaba que su proposición fuera aceptada así que se llevó una sorpresa. A partir de ese día el hada amarilla comenzó a acompañarlo en “secreto”.
Así sus días de rutina continuaron, sin embargo desconocido para Seni, él se vería envuelto en varias situaciones de manera inevitable.
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Diario de Madamme Prots. Entrada mas reciente.
“Mi nieta Lavender, estuvo observando y evaluando durante su estadía en casa a Inés Ros, y me comentó cosas muy interesantes. Mi evaluación de Inés es alta, confío en que eventualmente será una de las mejores domadoras del reino. Ella ya lleva un tiempo cortó pero sustancioso y fructífero trabajando en los establos, así que he pensado en hacerla presentar el examen de iniciación de las domadoras, generalmente esperaría un año completo de formación pero Inés es Inés.
Sin embargo tengo una preocupación, debido al poco tacto de mi nieta, la confianza que Inés me tenía se ha empañado, eso no ha afectado su trabajo en lo mas mínimo pero la semilla de la desconfianza ya fue sembrada. Pensando en como compensar el error de mi nieta llegué a la conclusión que sería bueno regalarle un látigo de domadora, no uno común sino uno de gran calidad, aunque se que es muy probable que Inés no quiera aceptarlo, pero le diré que es un regalo por aprobar el examen. No tengo duda alguna en que lo aprobará.
La montura de mi abuela, el grifo Quim, ya está completamente sano, incluso ya vuela con sus crías, las cuales están creciendo saludablemente. Cada vez que los veo juntos no puedo evitar sentirme afortunada y agradecida por haber conocido a Inés. Espero que permanezca con nosotras por mucho tiempo.
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“Qué aburrida estoy! No hay nada que hacer en este lugar. Estoy empezando a pensar que hubiera sido mejor ir a estudiar a la capital.”
Vanessa Fir Ler Wartell añoraba la vida animada de la capital. El lugar en el que ahora se encontraba, Ciudad Linterna tenía pocos medios de entretenimiento. Fue entonces que mientras buscaba como pasar el tiempo algo interesante sucedió frente a ella; un gato negro pasó corriendo a toda velocidad en su hocico llevaba “algo” amarillo, corriendo tras el gato se encontraba Inés Ros.
-¡Suéltala por favor! ¡No te la comas! ¡De seguro tiene mal sabor! Espera un momento que tal si hacemos un trato, ¡te daré algo mejor para comer a cambio de que me la devuelvas!.
Inmediatamente el gato negro se detuvo y dio media vuelta encarando a Inés, la señorita aprovechó el tiempo para recuperar el aliento, era obvio que llevaba tiempo persiguiendo al gato. Cuando se recuperó inmediatamente hizo una oferta.
-Te daré mi almuerzo si me la devuelves, el día de hoy preparé pollo frito. ¿Qué te parece?.
El gato negro sin soltar lo que tenía en el hocico, movió su cabeza de lado a lado.
-¿No es suficiente un almuerzo?.
El gato volvió a negar con la cabeza.
-Está bien, te daré 5 almuerzos. ¿Está mejor, así?.
En esta ocasión el gato asintió y luego escupió lo que tenía en el hocico.
Vanessa que los siguió en secreto, por fin pudo observar que era la cosa amarilla. Se trataba de una pequeña hada que por obvias razones estaba cubierta de baba de gato. Inés se acercó y con un paño la limpió, mientras el hada emitía chillidos agudos hacia el gato, era obvio que le estaba reclamando. Cuando por fin la terminó de limpiar, Inés la puso encima de su cabeza y se puso su sombrero de bruja ocultándola, tras lo cual sacó de su bulto un traste con comida y se lo dio al gato.
-Por favor no vuelvas a intentar comértela, sé que te dijo algunas cosas groseras pero no creo que lo vuelva a hacer.
-Si lo vuelve hacer le arrancaré las alas- Respondió el gato negro y luego volvió a devorar la comida.
-Supongo que es justo.
Tras ese corto intercambio de palabras, Inés esperó a que el gato terminara de comer y se retirara del lugar, y luego recogió el plato, y lo puso de vuelta en su maleta. Cuando el gato se alejó bastante, el hada amarilla salió de debajo del sombrero y le sacó la lengua al felino, el cual volteó a verla, el hada acobardada inmediatamente se escondió, el gato simplemente sonrió y luego continuó su camino.
-Espero que hallas aprendido tu lección , no vuelvas a decirle que es un gatito bonito. Aunque no te culpo por decirlo, yo también cometí el mismo error la primera vez que lo vi. Ahora regresemos, aun tengo clases, tendrás que esperar un poco mas antes de bañarte así que no insistas no estoy en una situación donde pueda faltar a clases.
Lindos sonidos salían desde el sombrero en respuesta a las palabras de Inés.
Sin sospechar que estaba siendo observado Seni se dirigió a sus clases.
-Si aún estuviera en la capital nunca habría visto algo como esto, Quién diría que Inés guarda un hada en el sombrero. Además pareciera como si ella y el hada ..., no, no es posible solo estoy pensando demás.
Desde ese momento Vanessa decidió seguir mas atentamente las acciones de su compañera, eso le ayudaría a pasar el tiempo.
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En una habitación especializada llena de toda clase de artefactos se encontraba la profesora Claudín. Ella revisaba una lista con varios nombres escritos, todos de estudiantes de la academia Cucurbita, sin embargo todos los nombres excepto uno estaban tachados.
-He descartado todas las posibles candidatas que pudieran haber hecho latir el corazón artificial y ahora solo queda una opción pero... simplemente no tiene sentido alguno, ella es la menos talentosa de todas las nuevas estudiantes, debo haber cometido un error a la hora de evaluar a las demás candidatas, sin embargo solo para cerrar las pruebas preliminares evaluaré a Inés Ros, aunque sinceramente no espero nada.
La profesora Claudin hablaba para si misma ya que estaba sola. Tras dar un suspiro de resignación dejó su silla donde había estado sentada y camino hasta un rincón de la habitación parándose de frente a una gran capsula de vidrio llena de un liquido ligeramente rosado dentro de la cual flotaba una pequeña persona, una niña de cerca de 10 años con la apariencia de una muñeca de porcelana.
-Lira, te lo diré una vez mas. Sin importar cuanto tiempo, te juro que te despertaré. Solo espera, pronto encontraré a alguien capaz de hacer latir nuevamente tu corazón.
Lira era su hermana menor sin embargo una antigua maldición hizo que naciera con un corazón débil, a los cinco años su familia acudió a una forjadora mágica quien sustituyó su corazón original por uno de metal como una medida desesperada por salvarle la vida. Sin embargo la maldición no se fue, sino que corroyó el nuevo corazón de metal mágico. sin más opción a los 10 años Lira fue puesta en suspensión animada.
Obviamente antes de esto se intentó romper dicha maldición sin embargo la familia de la profesora Claudín no pudo encontrar a alguien capaz de romper la maldición, el tiempo pasó y sus padres murieron, dejando a Lira como la única familia que le quedaba. La razón por la cual ella se volvió profesora fue para descubrir una cura a la condición de su hermana o mejor dicho una antigua adivina una vez le dijo que si se volvía profesora un día hallaría la cura para la condición de su hermana.
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Alacornia una anciana bruja dueña de una tienda de artículos mágicos se encontraba preocupada. En el sótano mohoso de su tienda que funcionaba como bodega, ella guardaba una considerable cantidad de artículos tanto legales como ilegales, y como no podría ser de otra manera era uno de los artículos considerados ilegales lo que le estaba dando dolores de cabeza.
-¿En que estaba pensando cuando me traje esto conmigo? ¡Ni siquiera lo puedo vender! Si la inquisición se enterara me cortaría la cabeza y la pondrían en una pica con un letrero que seguramente diría "Esto es lo que les pasa a las brujas estúpidas". Ya imagino mi rostro con una expresión estúpida siendo expuesta como adorno. ¿Pero por qué ahora? Todo este tiempo, este traje ceremonial ha permanecido como un simple vestido normal, incluso pensé que había perdido todo su poder con la muerte de su antigua dueña.
Frente a la anciana Alacornia encerrado en un circulo mágico repleto de conjuros se encontraba un vestido de mujer del color de la noche que emanaba un aura que parecía tragarse la luz, encima del vestido había toda clase de talismanes y símbolos que parecían mantener aprisionado al vestido, el cual se movía como si tuviera vida.
Si el vestido pudiera hablar, diría " Déjame ir, necesito cubrir su luz, para que el mundo no pueda verla y no intente extinguirla " Desafortunadamente, el vestido ceremonial que una vez le perteneció a una bruja de Cheshire no tenía boca.
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-¡No y No! , señorita, tienes que golpear el metal de manera rítmica. No lo golpees solo por golpearlo, obsérvame.
Veta la profesora de encantamientos, le estaba dando clases especiales a Seni, el cual se encontraba sudando profusamente debido al cansancio.
-Escúchame Inés, tienes la fortaleza física para trabajar los materiales y también posees talento pero no dejes que eso se te suba a la cabeza ya que si no tienes disciplina, entonces tus puntos buenos se desperdician.
-Entiendo Maestra forjadora, seré mas disciplinada.
-Eso espero, te pondré un examen especialmente diseñado para ti el próximo cuatrimestre.
-Puedo preguntar ¿Por qué?.
-Es obvio que espero mas de ti que de las otras niñas mimadas por eso te pondré un examen mas difícil que a ellas. Tómalo como una muestra de mi apreciación hacia a ti.
-No se que decir.
-¿Esperabas que te diera trato preferencial poniéndote exámenes mas fáciles o tal vez exentándote de mi materia?.
-Mejor no digo nada.
-Exacto, mejor menos platica y mas acción, toma el martillo y sigue golpeando el metal. No te olvides de pensar fuertemente en Gunrr, recuerda que para ella es esta cota que estás intentando hacer, si terminas creando un mal producto, ella podría terminar herida, pero si pones tu alma en ello podrías crear algo que salve su musculoso trasero.
-Si Maestra forjadora ya entendí.
Seni se ruborizó al escuchar las palabras de Veta, sabía que era una mujer directa y con poco tacto pero de buen carácter, aún así aún no podía acostumbrarse a su forma de hablar. Después de eliminar los pensamientos impuros, vertió todo su ser en infundir los sentimientos mas fuertes y puros que sentía por su profesora Gunrr , en el metal.
Las personas comunes solo podrían ver a Inés golpeando el metal rítmicamente pero para los ojos de Veta todo era distinto, ella veía fascinada el arcoíris de emociones que salían del cuerpo de Inés y entraban en el metal con cada martillazo.
Dos meses pasaron desde los primeros exámenes cuatrimestrales, para Seni todo sucedió en un abrir y cerrar de ojos, el sintió como si el tiempo se le hubiera escapado de las manos. Nuevamente la evaluación trimestral de la cantidad total de mana estaba a la vuelta de la esquina.
Bien ;)
ResponderEliminarEsa parte de mi vida esta pequeña se llama felicidad gif..Da gusto saber que aunque saques capido cada ciclo no lo abandones :(.
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