NOX VOLUMEN 4 CAPITULO 12


HOLA A TODOS, EL DÍA DE HOY LES TRAIGO UN CAPÍTULO UN POCO MAS LARGO DE LO NORMAL, ESPERO LO DISFRUTEN. ME ESFORCÉ PARA CREAR NUEVOS CONJUROS. RECUERDEN SUS COMENTARIOS SE AGRADECEN









Capítulo 12


Redor era un joven estudiante de la Santa Academia de la Paz y Valentía, él albergaba dos sueños en su corazón; uno era convertirse en un paladín y tal vez con el tiempo llegar a ser un sagrado paladín, el otro sueño era casarse con cierta doncella pero pareciera que el destino quisiera jugar con él. Apenas entró a la academia se enteró que su amada había ido a otro lugar lejano a estudiar, a la ciudad Lux, un lugar neutral con muchas de las mejores academias del mundo, cosa que nunca esperó. Al inicio se entristeció por el hecho de no poder verla y se arrepentía por no haber confesado sus sentimientos antes. De alguna manera logró superar su depresión inicial y se esforzó al máximo, unos meses después, Froc, uno de sus compañeros de intercambio que era un druida le invitó a ser su compañero de batalla para un torneo que se realizaría en Ciudad Lux, sin pensarlo dos veces Redor aceptó. Él se propuso una meta, reencontrarse con su amada, ganar el torneo y confesar sus sentimientos.



Redor llegó a la ciudad días antes que el torneo comenzara y empezó a buscar a aquella doncella que hacía su corazón latir y la encontró, solo que las cosas no eran como él había deseado, ella estaba con otra persona, a la cual le reía y daba toda su atención, él hubiese aceptado eso pues solo deseaba la felicidad de su amada, pero el sujeto del que ella se había enamorado era un mal hombre según la información que había recolectado, ¡Tal cosa no podría ser permitida!. 


Ahora mismo se encontraba en una habitación entrenando, varios espíritus que habían posesionado armaduras plateadas estaban frente  a él esperando sus órdenes, en el otro lado de la habitación, parado dentro de un círculo mágico un demonio con rasgos reptilianos estaba en guardia.



-¡Ataquen Milicia Sagrada!-.



Con la orden dada las 24  armaduras se movieron al unísono y confrontaron al monstruo el cual ante tal superioridad numérica sucumbió fácilmente. Redor había sido bastante astuto, un espíritu sagrado de nivel medio posesionaba cada armadura, era más sencillo que materializar al espíritu completamente, el consumo de energía se  había reducido drásticamente aun así requería una gran parte de sus reservas y concentración, pero si se tomaba en cuenta su edad, Redor realmente era un prodigio. Satisfecho, observó los restos del demonio, definitivamente nadie podría derrotarle.


-¡Espera por mi Lili Sanctus, abriré tus ojos y recobrarás tu libertad, y entonces te darás cuenta con quién debes estar!-.


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-¡Excelente! Solo eso puedo decir. Hemos tenido increíbles batallas en esta segunda ronda y eso que aún no termina. La siguiente batalla será entre el equipo conformado por Liz Wildwind y Jean Nox Crow contra Redor Centuria y Froc Wood. Espero con todas mis fuerzas que esta pelea sea emocionante. ¿Usted qué opina Arcano Rooscu?-.



- Yo igual espero una épica batalla, Jean Nox Crow es un excelente estudiante de mi academia Shade, y sé que no nos defraudará-.



-Según los documentos que recibí Jean Nox Crow es estudiante de la Academia de Sol-.



-Es un estudiante de ambas academias-.



-¡Oh! ¡Qué interesante!-.



Mientras los comentaristas se dedicaban a lo suyo el árbitro de esa batalla le pidió a los peleadores que se presentaran en el campo que en esta ocasión tenía un paisaje de rocas.



Redor le pidió a Froc la posibilidad de pasar antes a pelear ya que sabía que Jean Nox Crow, su peor enemigo, pelearía de primero en esta ocasión, el deseo por patearle el trasero era demasiado fuerte. Con la cabeza en alto y con un porte digno el joven caballero entró al escenario de batalla.



Vítores se alzaron de parte del público, él quitándose el casco de la armadura que llevaba les sonrió al mismo tiempo que les saludaba. Sus facciones eran las de un hombre joven atractivo rubio.



Después le tocó el turno a Jean Nox Crow, lentamente moviendo las llantas de su silla de ruedas el joven que estaba cubierto de vendas por todo su cuerpo entró, él usaba una extraña vestimenta de color negro con partes blancas y cargado de un montón de adornos siniestros. Esa apariencia junto con la terrible y agresiva atmosfera que le rodeaba detuvo en seco los vítores y aplausos del público.



-Arcano Rooscu. Estoy seguro que en la primera ronda el participante Nox Crow no se veía así . ¿Pasó algo?-.



-Sí, fue tan horrible que no quiero hablar de eso. Los malentendidos con las mujeres pueden ser terribles-.



-Entiendo…



Mientras todos estaban callados, la voz de tres señoritas se escuchó. Estas eran las tres L, junto con la capitana Marshall  ellas se encontraban en el palco especial de los participantes en turno, cargando una enorme pancarta que decía. ¡Lo sentimos mucho!



-¡Jean lo sentimos mucho, por favor discúlpanos!-.



Aunque sus intenciones eran buenas, eso hizo que todos los presentes especialmente los hombres vieran con ojos de odio al ya de por si malherido joven al mismo tiempo que hablaban mal de él



-(¡Eso es lo que me faltaba, daño psicológico! , ¡¿Por qué me pasa esto a mí?)!-.



En  el público también se encontraban Sila y Wolvi, quienes habían tenido la idea de echarle porras a Jean pero al ver tal reacción decidieron no hacer nada por esta ocasión. Por su parte Redor alcanzó el máximo de celos y furia al ver a su amada de esa manera, preocupándose y disculpándose ante tal hombre. El joven caballero quién a pesar de que no entendía que situación había acontecido, él estaba convencido de Jean era culpable.



-¿Están listos, combatientes?-.



-Si-.



-¡Desde luego!-.



Con la pregunta del referí siendo contestada el combate comenzó.



Redor sacó una daga y la arrojó al aire donde se multiplicó en 23 dagas mas las cuases se ensatarón en la tierra y se transformaron en un set de 24 armaduras plateadas de hermoso ver, sin perder tiempo él continuó con un conjuro de invocación



-“Sagrados espíritus que habitan en el lugar más puro. Les ofrezco unas humildes vasijas por favor acudan a mi llamado, habítenlas y destruyan al malvado enemigo”-.



De un círculo mágico que apareció encima de las armaduras salieron 24 destellos de luz que entraron en el metal. Las armaduras tomaron una tonalidad totalmente blanca y se levantaron de su posición, inmediatamente blandiendo sus espadas.


Al mismo tiempo Jean hizo su encantamiento.



-“¡Guardianes del Reino del Xibalba, guerreros implacables que vigilan las 4 direcciones! Desde donde los vientos vienen o van,  despierten, corran, salten, vuelen, vengan a divertirse, vengan a jugar conmigo. El norte es blanco como mis huesos, el sur es amarillo como mi bilis, el este es rojo como mi sangre, y el oeste es negro como mi alma. Soy su hermano, respondan mi petición”-.



Redor ordenó a sus armaduras atacar, las invocaciones de Jean no se habían manifestado así que esa era su oportunidad de acabarle. Las 24 armaduras atacaron de frente al unísono. Cada vez estaban más y más cerca de Jean y cuando solo les faltaba un metro las armaduras levantaron sus espadas con intención de blandirlas, en ese instante un fuerte viento sopló delante de ellas deteniéndolas en seco, al mismo tiempo que el cielo oscureció súbitamente.



Del norte una increíble cantidad de polillas de color blanco apareció las cuales aterrizaron enfrente de Jean, rápidamente las polillas se fusionaron dejando al descubierto un gigantesco esqueleto de color blanco puro, el cual usaba un ropaje tribal de color verde-azulado, encima de su cabeza tenía un penacho de plumas multicolores y como arma en cada mano sostenía una especie de espada hecha de jade con dientes aserrados.



Su aparición le robó el aliento a todo el público. El enorme esqueleto volteó a ver a Jean y este con su mano apuntó a las armaduras. El no-muerto entonces atacó a las armaduras mandándolas a volar por todos lados, mientras emitía un fuerte grito de guerra a pesar de no tener cuerdas vocales.



-¡¿Qué es eso?! ¡¿Qué rayos es eso?! ¡Arcano Rooscu!-.


-No tengo una idea totalmente clara-.



-¡Pero si es su estudiante! ¡¿Cómo es posible que no lo sepa?!-.



-¡Qué grosero! ¡Dije que no tengo una idea clara, no que no sé! ¡Además en mi academia se les da libertad  a los estudiantes para experimentar y revivir hechizos antiguos! ¡Al parecer Jean realizó una invocación de guardianes del inframundo de una cultura muy antigua y poderosa, son muy pocos textos que quedan sobre ellos, afortunadamente mi biblioteca tiene algunos códices!-.



-¡Siento mucho mi descortesía Arcano Rooscu, es solo que me emocioné! ¡Entonces por lo que entendí, ¿ese es un nuevo hechizo?!-.



-¡Así es! ¡Las personas que acudan a mi Academia tendrán la libertad de realizar investigaciones para lograr cosas como estas!-.



En esa discusión el director Rooscu no perdió la oportunidad de promocionar su academia.



En el campo de batalla  la pelea se hizo más salvaje, las armaduras y el esqueleto estaban casi igualados, aunque por la risa del esqueleto blanco no se podría estar seguro si estaba peleando en serio o solo estaba jugando.



Redor quién pensaba que tendría una victoria segura arrugó su cara por la irritación, aún tenía cartas a su disposición pero no quería gastarlas aquí, pensaba guardarlas para las siguientes batallas, sin embargo otro evento hizo que decidiera cambiar sus planes.  


Del sur otra numerosa colonia de polillas apareció pero esta vez eran de color amarillo y como con el primer enjambre se transformaron en un esqueleto gigante de color amarillo casi dorado con una vestimenta tribal similar al primero.



-¡Maldición!-.


Redor sacó una de sus cartas de triunfo con gran pesar, nuevamente arrojó una daga al suelo.



-“Espíritu valiente de bien y bondad, Irideter, por nuestro sagrado contrato te invoco a la batalla. Pelea a mi lado, hombro con hombro llegaremos a la victoria”-.



En este caso una armadura magnifica gigante del tamaño de los dos primeros esqueletos apareció y fue posesionada por una hermosa esfera de luz. La apariencia que tomó era sublime similar a un neogolem. El cual sin perder tiempo eligió como adversario al esqueleto amarillo.



El joven del país santo sabía que no podía alargar la pelea, sus reservas de energía se estaban agotando rápidamente, así que desenvainando su arma corrió hacia Jean esquivando a los esqueletos. Si podía derribar al invocador todo terminaría, el hecho de que su oponente estuviera en silla de ruedas era algo que él pensaba solo era un acto así que se acercó tomando las precauciones necesarias.



Viendo esto Jean sonrío aunque debido a los vendajes nadie pudo verlo, extendió su brazo  derecho y en su mano apareció un báculo negro tallado con figuras de  flores, serpientes y calaveras.



Cuando su oponente lanzó el primer corte Jean le bloqueó con el báculo, aunque Redor se  sorprendió continuó con su lluvia de ataques sin descansar y en cada ocasión con facilidad Jean le detuvo y desvío. Redor había confiado en que Jean al ser un mago no tendría habilidades de combate físico pero parecía que ese no era el caso  y eso le frustraba aún más.



-¡Es excelente el control de la espada que tiene el participante Centuria! ¡Pero lo que es  realmente magnifico es como el participante Nox Crow se defiende!-.



-Si mi estudiante pudiera moverse de esa silla, podrían ver su  magnífica técnica de combate con armas-.



-(¡Esto no se ve bien! ¡Piensa Redor! ¡Si no derrotas a este sujeto perderás todo!) ¿¡Acaso solo sabes defenderte!? ¡Jean Nox Crow!-.

El joven caballero intentó provocar a su oponente pero no sirvió de nada.

-Creo que estás bajo la premisa de que los magos no saben pelear cuerpo a cuerpo o con armas que solo los caballeros pueden hacer algo así.¿Me equivoco? Si pudiera pararme de esta silla te demostraría que estás cometiendo un terrible error-.



Jean respondió tranquilamente sin hacer caso a las provocaciones. Redor alzó su espada a lo alto y la llenó con todo el prana que podía usar en ese momento sin descuidar el suministro a sus caballeros y cuando estuvo satisfecho con el poder destructivo blandió la espada hacia Jean.



-“Espada de Luz”-.



-“Muro de lamentaciones”-.



El joven Vizconde recitó un corto conjuro y una esfera negra con rostros agonizantes en su superficie se manifestó. La espada de Luz chocó contra el oscuro muro, la energía de luz y oscuridad se dispersaban violentamente pero ninguna cedía.



Un nuevo estruendo se escuchó en el campo de batalla y una tercera colonia de polillas de color escarlata descendió desde el este y formó un tercer esqueleto de color rojo intenso. Al ver esto Redor supo que estaba en desventaja, para que sus caballeros no cayeran les aumentó el suministro de energía, al hacer esto su espada perdió el brillo hasta que finalmente desapareció, Jean sin desaprovechar la oportunidad con su mano izquierda le dio un pequeño toque a la espada, inmediatamente  su oponente se replegó e instintivamente soltó su arma que se había tornado de rojo vivo , al tocar el suelo esta se derritió.



-¡¿Qué clase de truco es este?! ¡Sin importar tus artimañas te derrotaré y le abriré los ojos a ella!-.



-No hay trucos-.



Sin decir más Jean le arrojó esferas de fuego, Redor se defendió esquivando o deteniéndolas con su escudo. La intención de Jean era cansarle y hacer tiempo para bajar el telón con gracia.



-¡No puedo perder! ¡No perderé!-.



Por su parte el joven caballero estaba perdiendo la paciencia y energía con cada segundo que pasaba, finalmente decidió usar su último recurso. Nuevamente sacó una daga blanca pero no la arrojó, la daga se transformó en un rifle antiguo de color blanco y dorado.



-“¡Espíritu sagrado de poder y justicia, Irindor, te imploró vuélvete mi fuerza!”-.



Una nueva luz blanca cayó del cielo y entró en el arma, entonces Redor jaló el gatillo. Al mismo tiempo un cuarto y último estruendo se escuchó, otra colonia de polillas de color negro descendió desde el oeste. Jean durante el intercambio de ataques movió su silla de ruedas para que el oeste quedará a su espalda, algo de lo que Redor no se dio cuenta, el nuevo esqueleto de color negro como el abismo recibió el disparó, para defenderse hizo aparecer un escudo de jade tallado como un mascaron enfrente de él. Cuando la Luz desapareció lo que se pudo ver fue al esqueleto intacto y Redor hincado en el suelo jadeando fuertemente, y pronto sus caballeros cayeron igual que él. La armadura gigante asediada por dos esqueletos fue destruida, y los 24 pequeños fueron aplastados. A pesar de eso en los ojos de Redor la intención de no rendirse  aún brillaba fuertemente. Al ver esos ojos a través de la comisura del casco, Jean lo comprendió todo, colocando el báculo enfrente de él, le arrojó una esfera de oscuridad, tras el impacto la armadura que cubría al caballero santo se volvió polvo dejándole con sus ropas de vestir. Jean se había percatado de que alguien es decir Redor les había estado observando o mejor dicho había estado observando a Lili en los pasados días, no hizo nada simplemente porque no sintió malas intenciones, uniendo cabos y haciendo conjeturas llegó a la conclusión que la persona frente a él solo era un simple hombre enamorado. Sin el casco que cubría el rostro de su oponente, Jean le miró a los ojos directamente y le dijo:



-Si la amas solo díselo, deja de soñar en lo que no es o en lo que puede ser, deja de imaginar cosas que no son, no seas un cobarde se un caballero. Te juro por mi vida que no he atentado contra su honor-.



La mirada desafiante de Redor desapareció al ver la seriedad en los ojos de Jean, y fue sustituida por una expresión tonta, un segundo después como si comprendiera algo, simplemente se soltó a reír y declaró:



-¡Me rindo!-.



-¡La batalla ha concluido!-.



Con el anunció del referí la primera batalla de la segunda ronda finalizó. 






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Acerca de David-A Gato

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