Capítulo 23
Las ruedas comienzan a girar
En el este del continente Antei, se halla una de las
ciudades más sagradas conocidas por el hombre. La sacra tierra de Acme.
Es en este lugar donde los poderes que gobiernan a la
civilización militar se reúnen.
En un amplio salón privado, dentro de un edificio ubicado en
la zona más prestigiosa de la ciudad, se reúnen, sentados frente a una mesa
redonda, miembros del consejo de los señores de la guerra.
"Todos están al tanto de las noticias, me
imagino".
"En efecto. La sexta legión, enviada por el general de
dos cuernos regreso con las manos vacías".
"Esto tendrá consecuencias. Movilizar a más de 3.000
hombres para nada, es un derroche de los recursos de Iren".
"Bueno, no es como si el General hubiera estado dirigiéndolos
él mismo".
"El comandante de la legión era ese joven prometedor,
Jemur. El general prometió una victoria segura".
"Según entiendo, la legión no fue derrotada, ni
siquiera puede decirse que tuvieran una batalla".
"Es verdad. El reporte dice que la academia quedo hecha
escombros y ceniza".
"En ese caso, no había ganancia en tomar ese intento de
ciudad".
"Hablamos de una ciudad que lleva existiendo desde hace
tanto como la nuestra, existe gloria en conquistarla. Sin embargo...".
"Sin embargo, el comandante dio su palabra de dejar en
paz la ciudad si perdía, que así fue".
"Hum. Un hombre desconocido capaz de derrotar a un
comandante de soldados Acme. Me niego a creer que exista semejante individuo
sin que lo supiéramos hasta ahora".
"¿Y qué hay del general de dos cuernos? El era un don
nadie, sin embargo derroto uno tras otro a los enemigos menos pensados. Una
proeza así ya fue hecha antes".
"Estamos hablando de un hombre en cien... no, en mil
millones. No puedes comparar al general, la reencarnación de nuestro glorioso
fundador, con un sujeto del que no sabemos nada".
"Yo no dije eso, solo digo que es posible para personas
excepcionales pasar desapercibidas durante cierto tiempo, el general es el
mejor ejemplo".
"Aunque al final, los poderosos siempre salen a la luz,
atraídos por la fuerza de otros como ellos".
...
"¿Y esto afectará al general de algún modo?"
"No lo creo, no importa cuánto digan al respecto,
mientras nosotros apoyemos al general, tendrá la libertad de llevar a cabo sus
deseos".
"Ese es nuestro deber y recompensa. Pronto el
continente entero estará a merced del general".
Todos los convocados lanzaron una gran ovación al aire
diciendo... "Gloria al Demonio de dos cuernos".
◆◇◆◇
En un edificio algo más alejado del área de mayor prestigio,
con una estructura menos ostentosa y unas habitaciones aun así lujosas, se reúne
otro grupo de miembros del consejo.
"Por fin, una mancha en el historial militar del
demonio".
"Tal vez podamos usar esta oportunidad para reprimir un
poco su poder".
"Es inútil, mientras tenga a una facción del consejo de
su lado, no tenemos poder sobre él. Incluso uno de los reyes está con él".
"Maldita sea. Nunca debimos permitir que llegara tan
lejos. Esos tontos de la facción del demonio, si supieran lo que
nosotros..."
"Sabes que no podemos decirles. Es nuestro deber
silencioso proteger la gloria de Iren".
“... ¿Qué sabemos sobre ese asunto?"
"Nuestros agentes dicen que el comandante de la legión
era Jemur, el joven prominente que completo la prueba de Acme en menos de un
año".
"Oh, así que él... Si mal no recuerdo, tenia gran
potencial, si no hubiera aparecido el demonio, tal vez hubiera llegado a
general en 20 años más".
"No sirve de nada pensar en lo que hubiera pasado...
Por otro lado, el hecho de que fuera derrotado..."
"Un Aristoi, así se presentó el hombre que derroto a
Jemur en un combate limpio".
"Según su descripción de lo ocurrido, sucedió todo en
un instante, Jemur no pudo hacer nada".
"Alguien que pueda hacer eso... ¿Al nivel de los
Generales? o tal vez, ¿del mismo demonio?"
"Es posible. Si es verdad, podría ser de valor para
nuestra causa. Es necesario vigilarlo".
"¡Ja! ¿Y quién lo haría? Alguno de tus hombres es capaz
de infiltrarse y seguir a un Aristoi que venció fácilmente a Jemur sin
exponerse a sí mismo y desafiarlo?"
"No. No puedo decir que yo no haría lo mismo si lo
tuviera enfrente".
"Debemos conformarnos con saber de su existencia a
tiempo, no como con el demonio. Solo debemos mantener la vigilancia en el pie
de la montaña de Galia para enterarnos si hace algún movimiento. Jugamos con la
ventaja de que se encuentra en un sitio aislado, tal vez nunca más sepamos de
él".
"Hablando de los alrededores de Galia. ¿El demonio no
tomó un pueblo cercano como parte de su plan de conquista de la ciudad?"
"Ese bastardo. Ningún general de Iren debería caer tan
bajo como para pedir a un repugnante mercenario que luche por él, menos alguien
que comanda soldados Acme."
"¡Jaja! ¡Seguramente por eso sus planes salieron mal,
Ashma lo castigo por su deshonra!"
"Pensaba que no creías en Ashma".
"Que no crea en la profecía de la estatua, no significa
que no crea en la deidad. Simplemente no confió en la interpretación que hacen
los sacerdotes. Aquellos que no apoyan a la gloria de Iren no son de confianza.
Incluso los tontos de la facción del demonio creen que hacen lo mejor por
Iren".
"Aún así, por su culpa, el demonio esta fuera de
control".
"Desde que ganó el título de demonio de dos cuernos, su
autoridad es como la de los 4 generales juntos, a no ser que el consejo entero
se ponga de acuerdo, no podemos darle ordenes. La opción de que lo hagan los
reyes esta fuera de discusión, el rey de la guerra prácticamente lo ha elegido
como su sucesor".
"Si ese maldito demonio muriera de una vez..."
"¿Realmente crees que un simple asesino podría lograr
tal hazaña?"
"Jamás hablé de asesinato. Si no puedo matarlo yo
mismo, haría algo tan cobarde como enviar a otro a hacerlo por mí. Antes de eso
prefiero que se salga con la suya".
"No sirve de nada detenerlo si perdemos nuestro honor
en el proceso. Eso sería una mancha en nuestra gloriosa Iren".
"Pido a Ashma que nos dé la oportunidad de evitar un
desastre".
◆◇◆◇
Iren, el país con mayor poder militar que se conoce en el
continente. Es gobernado por una trinidad que mantiene un equilibrio de poder.
El Rey de la Paz, Encargado de todos los asuntos políticos y
administrativos. También es el estratega militar con mayor autoridad. Este
puesto puede ser heredado, ya que es el rey mismo quien escoge a su sucesor.
En un ambiente donde el combate y la gloria lo son todo, difícilmente
alguien podría enfocarse en aprender lo necesario para cumplir como rey de la
paz. Es por esto que los hijos del rey actual, que son criados bajo su
supervisión en todo lo necesario, suelen ser los mejores candidatos. Sin
embargo, si no son dignos, el rey no dudará en escoger a otro fuera de su
familia.
El Rey de la Guerra, Es el rigente de las academias e
instrucciones militares. Es además quien dirige a los 4 Generales. En caso de
emergencia, asume el control total de Iren. Por este motivo, solo puede ser Rey
de Guerra aquel que es reconocido por todos como el mejor de los Generales.
Normalmente, uno de los 4 generales termina sucediendo al
rey de guerra, ya que son la fuerza de Iren.
Por último, el tercer poder de esta trinidad es <<El
Consejo de los Señores de la Guerra>>
De vez en cuando, uno de los señores de la guerra asciende
al trono, pero por lo general, el consejo está formado por los 27 cabecillas de
las familias más poderosas de Iren. Juntos, los miembros del consejo poseen una
autoridad equivalente a un tercer Rey.
Sin embargo, el consejo suele estar dividido en facciones
que no se ponen de acuerdo. Y es por esto que no poseen la autoridad para darme
órdenes. Ya que solo los reyes de Iren o el consejo al completo, tienen la
autoridad para ordenar al General demonio, reconocido como un caso excepcional
en el mundo militar.
Mientras siga así, podré actuar con libertad.
Nunca fueron tan importantes como para preocuparme por
ellos. Lo único que me preocupa ahora, es la noticia de mi primer fracaso.
Aunque técnicamente yo no fracasé, el hecho de que no posea aquello que
pretendía conquistar, es suficiente para irritarme.
Bueno, si realmente hay ahí fuera alguien capaz de
enfrentarme, tarde o temprano me lo encontraré en mi camino a la conquista del
mundo. Por ahora, continuaré con mi plan, después de todo no movilicé a mis
fuerzas solo para tomar una triste academia en un lugar perdido como Galia. En estos
momentos se encuentran cercando la frontera este de Jagheb, y otra de mis
legiones ya se encamina hacia la frontera oeste.
Normalmente, Jagheb es atacado en el sur de su territorio,
pero mis intenciones no son atacarlos frontalmente por ahora, mis objetivos son
las academias AS.
◆◇◆◇
"Es obvio capitán, nuestro destino es la academia más
cercana a la de Galia, dentro del territorio de Jagheb".
Nota del autor: Y con esto damos por finalizado el arco 1 - "Galia". Personalmente quiero dar las gracias a un comentario anónimo que me animo a seguir publicando cuando el arco iba por la mitad. En aquel momento mi ritmo de publicación habia caido y la verdad estaba bajo mucha presión IRL. Saber que de hecho hay gente que sigue la historia es una motivación para continuar, y si me pagaran seria mejor :v
Ahora más vale que estén atentos porque en la segunda semana del segundo mes, comienza el segundo arco "A la sombra de la guerra". Se cuidan.
Ahora más vale que estén atentos porque en la segunda semana del segundo mes, comienza el segundo arco "A la sombra de la guerra". Se cuidan.
Se va a liar.
ResponderEliminar(Me iré comprando los aperitivos para cuando comience).
Y así despedimos el primer arco. Muchas gracias por la novela, vale la pena esperar por la calidad que tienen los capítulos.
ResponderEliminarLa espera sera insufrible, gracias por el cap
ResponderEliminartiene pinta q se encontraran en la otraacademia AS
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