Novela "El Ave Olvidada"

Hola a todos, aquí David A-Gato, les invito a leer esta nueva historia que escribi hace un tiempo, espero que les guste.

Sinopsis:   JERARQUÍAS 1  EL AVE OLVIDADA

“Nuestra bondad fue pagada con muerte, por mi debilidad mis alas se han bañado de sangre”

Como respuesta al aumento de crímenes de índole extranormal, los gobiernos del  mundo se han visto obligados a realizar movimientos para combatirlos.

Cada país ha creado escuelas donde se reúnen linajes mágicos, psíquicos naturales, y otras personas con poder ,con el fin de proteger la seguridad de los ciudadanos. 

Utilizando de “cortina” los llamados “Poderes Psíquicos” los cuales pueden ser explicados con medios científicos para no alarmar a la población general y lograr su aceptación.

Un mundo donde las artes místicas como la magia se ponen la máscara de la ciencia, para proteger lo que es importante.

PRÓLOGO 1: DE UNA FORMA DE CÓMO NO

INICIAR EL DÍA A DÍA

Ring-Ring-Ring-Ring-Ring-Ring-Ring-Ring, en cierto departamento se podía escuchar el sonido de un despertador en el nivel máximo de volumen, reverberando por todo el complejo de construcciones, este inmenso ruido, probablemente se debía a causa de que alguien lo programó de esta manera,se mantuvo por alrededor de 20 minutos, aparentemente debía ser un recordatorio de algún evento importante al que había que llegar a tiempo.

En ese departamento había una habitación, en el suelo de la cual se encontraba ropa de toda clase regada así como útiles escolares, también se veía un guardarropa con los cajones medio abiertos, un escritorio con una gran cantidad de libros encima que hacía que uno se preguntara cuándo se

rompería bajo todo ese peso, y una cama, ,en ella se podía encontrar la silueta de una persona completamente impasible y ajena a todo este ruido, o al menos así lo parecía, eran alrededor de las 7:30 am, hora en que la mayoría de las personas ya estaban realizando sus distintas actividades

productivas, a diferencia de la persona que yacía en la cama, (así que los afectados por este ruido se reducían mucho), inesperadamente la persona empezó a moverse, por supuesto no de manera consciente, más bien medio dormida,

dio una media vuelta a la izquierda estirando su brazo, el cual se detuvo cerca de 15cm arriba del reloj despertador, que se encontraba encima de un pequeño mueble de madera, y en una fracción de segundo pasó lo siguiente:

La mano se dirigió sin piedad a una increíble velocidad hacia el reloj, mientras su propietario decía en voz alta:

-¡¡¡Deja de hacer ruido!!! ¡Maldita sea!- superponiendo su voz al ensordecedor ruido del reloj, un sonido metálico se pudo escuchar, el despertador quedó hecho completamente chatarra, no de una forma pareja como cuando se aplasta una lata de aluminio, pues algunos de sus componentes quedaron bastante lejos de la escena del crimen.

Se hizo silencio.

Una vez más la persona en cuestión se volvió a acomodar, pero viendo la luz del sol que se colaba por sus ventanas, inmediatamente después se levantó con la velocidad de un rayo.

-¡¡Demonios, se me hizo tarde!! ¡¿Por qué no sonaste pedazo de chatarra?!- dijo esto mientras volteaba a ver la zona del crimen, aparentemente no recordaba lo que ella misma acababa de hacer. Al ver el reloj totalmente destruido, su expresión cambio de enojo, a la pena, de allí a la tristeza, luego a la negación y finalmente a la aceptación. Este proceso de luto duró apenas 5 segundos.

- Tendré que comprar un repuesto al volver de clases- comentó para sí misma encogiéndose de hombros.

Tenía que darse prisa o llegaría tarde para atender cualesquiera que fueran sus compromisos, se puso su uniforme, rápidamente corrió al baño, se lavó el rostro, agarró sus útiles de aseo, con una mano se cepillaba los dientes, mientras que con la otra se arreglaba el cabello, de haber tenido más de dos manos, probablemente las hubiera usado para maquillarse a la velocidad de la luz, pero actualmente tenía sólo dos, tuvo que esperar a que se

desocupara una para realizar esta acción, también se puso pupilentes, todo el proceso llevó apenas 5 minutos, volteó a ver al espejo colocado arriba del lavado para ver el resultado, su rostro se mostró, con una piel clara, sin rastro de brillo, tersa, ojos de color azul, una nariz delgada refinada, labios delgados rojizos y un cabello rubio intenso largo que cubría sus orejas, hasta llegar a sus hombros, una pequeña sonrisa se dibujó, aparentemente satisfecha.

-Muy bien, hora de ir a clases- declaró de manera alegre y salió corriendo a toda velocidad de su habitación, no sin antes agarrar un maletín que se encontraba en el suelo y meter algunas cosas en él de manera aleatoria. Esa era su forma descuidada y de ninguna manera saludable en la que iniciaba todos los días.

PRÓLOGO 2: DE OTRA FORMA PEOR DE

CÓMO NO INICIAR EL DÍA A DÍA

Ya sea que se viera de cerca o de lejos lo que se encontraba en medio de una bodega en ruinas, específicamente en su suelo, lleno de polvo y con varios muebles de madera ya podrida y rota, parecía definitivamente un cadáver boca abajo, de algún homicidio reciente, pues no parecía tener un aspecto grotesco.

El sujeto en cuestión vestía ropa de color negro, la cual ahora se encontraba llena de polvo, no se movía, ni se escuchaba el ruido de su respiración, su rostro no se podía ver debido a que no había luz suficiente.

Una paloma de color gris como cualquier otra de las que abundan en los edificios abandonados, empezó a descender sobre el cuerpo rápidamente, llegó y se posó en la cabeza del supuesto cadáver, no tardaron otras en llegar y posarse en distintas partes del cuerpo hasta formarse una masa de plumas, acto seguido empezaron a picotear el cuerpo, el cual empezó a retorcerse, se levantó y empezó a correr en círculos gritando.

-¡Aún estoy vivo! ¡Ya déjenme en paz caníbales, aves de rapiña!- dijo, mientras la parvada lo seguía salvajemente, ululando sin parar, logrando guardar algo de distancia de ellas, salió de la construcción y logro perderlas,se encontraba en un área de bodegas abandonadas cerca de un puerto.

Inmediatamente se puso a hacer una recapitulación mental de los eventos que culminaron en esta situación, después de unos minutos, un ruido proveniente de uno de los bolsillos de su camisa lo sacó de su ensimismamiento.

Sacó su celular y contestó.

-¿Si?....¡ah! no me pasó nada o debería decir es como si no hubiese pasado nada, logré escapar a tiempo- un ruido estridente casi ininterrumpible se

escuchó desde el otro lado.

-·¿#¬€/%·(7&P;z 9+ç!!??_:;-una extraña cacofonía salió del celular.

-Una dama no debería decir esas palabras, es de mala educación,.-El hombre empezó a alegar pero….

-“!·$·%&)8&/??¿¨´.,_Ç*+¡zq33wtkf’- recibió una respuesta un poco más larga que la anterior-

-Está bien, está bien, lo siento, lo prometo, no te preocupes más, me disculpo, fui un idiota, no me volveré a exceder, seré más precavido lapróxima vez - múltiples frases de disculpa de manera continua salían de su boca mientras cruzaba los dedos de la mano que no ocupaba en ese

momento.

Antes de que hubiera una réplica de la persona que le habló.

-La comunicación se corta, pierdo la señal, ya no tengo batería, lo siento me comunicaré en otro momento- agregó de manera cliché mientras hacía sonidos de estática con su boca y finalizaba la comunicación, de cualquier forma para prevenir otra llamada apagó su celular.

-Esa fue una noche muy loca. Aunque hay muchos que juegan a ser dios,verdaderamente hay muy pocos que obtienen resultados decentes, aquellos que pueden ser contados sólo con los dedos de una mano, causarán invariablemente mucho daño a escala global.

Suspiró profundamente con expresión resignada.

-Bueno es hora de hacer de niñera- una frase sin lugar a dudas fuera de contexto y sin sentido hasta el momento fue dicha. 

Cuando se dispuso a seguir su camino, le cayó una sustancia desagradable en su hombro.

Volteó a ver hacia arriba solo para darse cuenta que todo el bullicio originado por la llamada había delatado su ubicación a las palomas. Las cuales lo veían con una mirada feroz, no propia del tipo de ave en cuestión, más bien parecían halcones viendo a un indefenso conejito, de tal forma que

hacían comprender a uno por qué habían sobrevivido y prosperado en las grandes ciudades.

-¡¡Oh, carajo!!- soltó, reanudando nuevamente su huida, mientras la parvada lanzaba su ataque, su figura se perdió en la lejanía. Era más o menos común que todos sus días comenzaran o terminaran de esta ridícula manera.