Capítulo 5: Todas las partes del asalto a Zedal (Everyone_Are_Guilty)
Resumen del capítulo anterior:
Kimizu: Profesora, ¿le puedo tocar las teclas?
Quiel: Él es mi linda mascota.
Yigo: Es el decimoctavo.
Aosora: Es hora del ataque a Zedal.
Parte 1
En medio de una habitación del tamaño de una sala de baños hecha enteramente de madera, había arrodillado un humano de unos 17 años de edad; las múltiples heridas y golpes, sumado a la sangre que cubría su plateada armadura, reflejaban el maltrato al cual estaba siendo sometido.
En frente de él, su verdugo, un humano varón de trece años de edad que blandía de manera salvaje una guadaña de dos metros de largo.
Los títulos de la víctima y del verdugo no coincidían para nada con la escena que protagonizaban.
La victima poseía el título del <<Héroe que trae la justicia del cielo>>, el título del verdugo era el de <<Esclavo que no le haría daño a nadie>>…
Ya sea una broma del destino, ambos se encontraban mirándose a los ojos.
Los ojos del apaleado reflejaban en su color azul una calma y belleza que contrastaban con su cuerpo dolido como si gritaran <<Este no va a ser mi fin, no voy a ser derrotado por alguien como tú.>>
Los ojos del verdugo en cambio parecían estar ennegrecidos en una mezcla de odio y dolor, sus ojos parecían susurrar <<Bienvenido al infierno>>.
Entonces, en el momento que el héroe se levantaba, fue golpeado por la parte trasera de una enorme guadaña impulsada por la fuerza centrífuga de un giro; quien la sostenía, solo exhibió una temporal sonrisa sádica en el momento en que notó que el cuerpo de su víctima no podía verlo.
El verdugo estaba sumido en una mezcla de instinto asesino y éxtasis profundo.
Entonces, cuando el héroe que había sido arrojado rodando cinco metros por el suelo intentó pararse de nuevo, apoyando la fuerza en sus manos, la guadaña trazó un arco sobre su propietario y terminó impactando la espalda del héroe con una cantidad poco considerable de fuerza.
Más fuerza sin duda lo habría matado, sin embargo, algo estaba conteniendo al verdugo; un tatuaje que hasta hace unos segundos no estaba allí, le propinaban el dolor del agua hirviendo sobre su piel.
El tatuaje recorría desde el rostro, el pecho y las extremidades del verdugo, ese tatuaje le impidió matar al héroe; irónicamente, el tatuaje además estaba aumentando el sufrimiento de este últim, debido a que mientras no muera, puede seguir sintiendo dolor.
Sumido entonces en éxtasis, dolor y furia, el verdugo exhibió una sonrisa sádica hacia el techo de la construcción, antes de agitar una vez más la guadaña.
Había una tercera persona en esta escena; un niño demi-humano de 13 años de edad; ubicado en una cama en medio de la habitación, sus ojos cerrados y con heridas y golpes por todo su cuerpo, su pierna estaba rota en dos partes distintas, su pecho estaba vendado bajo varias capas de tela blanca, su cabello rojo mostró signos de que había sido arrancado a la fuerza de manera violenta.
Entonces, la guadaña siguió balanceándose hacia el adolorido héroe.
Parte 2
Las teclas de un órgano dejaron de sonar, solo se podía escuchar de manera activa la respiración de una mujer-halcón y un esclavo de trece años de edad. La faena había terminado y había empezado a oscurecer. Bajo este ambiente, se podía ver el paseo nocturno de las personas; era una ciudad pacífica.
Punto de vista de Quiel.
Al ver terminada la presentación bajé rápidamente de las gradas y me dirigí corriendo hacia el centro del coliseo.
—Bien hecho— le dije a Kimizu.—es bastante increíble que hayan tocado por seis horas casi sin detenerse.
—Es bastante agotador, pero los profesionales lo pueden hacer por mucho más tiempo.
—Por cierto…— me detuve a mitad de la oración.
—¿Ocurre algo? ¿Hay algún problema?— me dijo mientras inclinaba la cabeza un poco.
—Es solo que, me quedé pensando en las palabras que dijiste.
—¿Las palabras que dije?
—Así es, sobre que amarás a este mundo…
¿Qué quieres decir con eso?
—¡Ah! Eso, es la verdad.— Aun no sé a qué se refiere... —Cómo debo decirlo… Realmente me agrada este mundo.
Avanzaba la noche.
19:00 horas
De vuelta en casa en el distrito central, podía escuchar a los adultos conversando sobre temas que poco me interesaban; caminábamos, éramos un grupo de unas ocho personas.
En el grupo de vanguardia, nos encontrábamos Kimizu y yo.
Kimizu no habló durante todo el trayecto, parecía especialmente interesado por lo que decían los adultos detrás de nosotros, debido a que cada tanto reducía la distancia de sus pasos.
Kimizu es mi esclavo-mascota. No, no es eso… Kimizu es mi amigo. Desde el momento en que lo compré, lo único que quería era un amigo.
Von Henrius; ese apellido es pesado.
Desde hace un par de siglos, la parte central del territorio demi-humano se ha mantenido en disputa; es en este periodo tiempo y en este lugar en el cual un noble comerciante de una familia poco influyente ganó poder, Alequius Von-Henrius Hagmus Philor.
Sus habilidades como estratega le valieron muchas victorias, sin embargo su campo de batalla eran las finanzas; su mayor habilidad era la previsión del mercado, gracias a ello, en solo una década logró amasar una fortuna que rivalizaba con la de un duque. Desde entonces el título y el peso del Von Henrius se han visto movido de generación en generación en las ramas principal y segundaria de la familia.
La familia principal se había movido hacia el marco militar, su actual líder es Xanxed Von Henrius Kirkien Hagmus.
La familia segundaria se había mantenido en el negocio comercial, su actual líder es Daniel Von Henrius Tabul Igmel, su esposa es Ekaterina Von Henrius Kirkien Blank.
La hermana mayor de Ekaterina, Angelene Von Henrius Kirkien Hagmus, es la hija del primer matrimonio de su madre con un hombre que se consideró famoso por sus grandes inventos, su nombre era: Giuseppe Hagmus, el único hombre que la madre de Ekaterina y Angelene dijo que amó.
El nombre de la madre Ekaterina y Angelene es: Lili Kirkien, anteriormente Lili Hagmus.
Angelene se había casado con el líder de la familia principal, Xanxed.
¿Por qué hago esto?, porque quiero después meter a Hagmus en el segundo volumen.
Por todo esto, el apellido Von Henrius es un apellido pesado.
Dan-Quiel no era la excepción, sino la confirmación de la regla de cuanto peso se podía colocar sobre alguien.
Parte 3
En la oscuridad de la noche, un ejército de 100,000 humanos avanzaba por la zona desértica en las afueras de la ciudad de los canales. Estaba liderado por dos personas, uno de ellos era el general de las tropas estacionarias de la fortaleza de Valfrist, el otro era el héroe Aosora Tenshi. Era una unidad multi-formada, con habilidad en el uso de la lanza y la espada.
El general de las tropas estacionarias de Valfrist poseía un título bastante grande también, <<Heroína de la lanza de Stab>>; su nombre real era Hikari Hina[1].
El objetivo de la misión era atacar la ciudad de Zedal y en medio de la confusión, rescatar al decimoctavo héroe invocado Kimizu Ouki.
Se han invocado en numerosas ocasiones personas de otro mundos con el fin de obtener ventaja militar sobre los enemigos; estos invocados recibían el nombre de héroes, actualmente, la suma total de las personas que habían sido invocadas era 18.
Los dioses de los humanos pueden invocar estos seres, lo hacen sin objetivo alguno, casi podrías decir que es de manera accidental; pero generalmente estos héroes resultaban ser de una potencia positiva para los humanos en constante guerra contra los demi-humanos y los demonios.
Del mismo modo, los dioses demi-humanos lograban avanzar la capacidad de ciertos niños demi-humanos, estos demi-humanos se conocían como usuarios de Kira, ellos poseían habilidades superiores al resto, por lo cual se volvían también en una fuerza considerable para las tropas.
Por el lado de los demonios, cada tanto, algún demonio recibía un tatuaje en su rostro, este aparecía como si nada y señalaba a aquellos que se convertirían en reyes demonio en el futuro; además, es bien sabido que aquellos que obtienen dichas marcas, reciben además la sabiduría de los anteriores reyes demonios.
Actualmente, esta es la disposición de estas figuran entre los bandos:
Humanos> Héroes invocados activos: 5
Catorceavo héroe invocado: Rizume Yoru (17)> Héroe de la pluma
Quinceavo héroe invocado: Aosora Tenshi (20)> Héroe de la espada
Dieciseisavo héroe invocado: Hikari Hina (19)> Heroína de la lanza Stab
Diecisieteavo héroe invocado: Misato Mikai (10)> Heroína de los guantes
Decimoctavo héroe invocado: Kimizu Ouki (13)> Héroe de ¿¿¿???
Demi-humanos> Usuarios de Kira activos: 4
· Jillim Afude (25): Usuaria de la fuerza de Hércules
· Lihato Gaul (15): Sinergista.
· Villeta Salem (17): Visión universal.
· Dan-Quiel (13): ¿¿¿???
Demonios> Reyes demonios activos: 9
1. Rey del distrito Butrak: Maou-sama Innikus (19)
2. Rey del distrito Zinali: Maou-sama Floria (24)
3. Rey del distrito Norkus: Maou-sama Regulus (15)
4. Rey del distrito Hira: Maou-sama Criseida (19)
5. Rey del distrito Quibnis: Maou-sama Wolfram (32)
6. Rey del distrito Atropatrene: Maou-sama Lizeth (28)
7. Rey del distrito Querberus: Maou-sama Horolius (12)
8. Rey del distrito Fang: Maou-sama Fangus (15)
9. Rey de la capital demonio: Gran emperatriz Maka (26)[2]
Parte 4
En algún lugar del territorio demi-humano, en los terrenos que corresponden a la frontera de los países de Handerser y Qalios, había una mansión.
Esta mansión bellamente decorada estaba completamente vacía, de no ser por una sola persona que se acostaba completamente sobre un sillón.
Esta mujer de proporciones envidiables y piel acaramelada poseía un largo cabello castaño que llegaba hasta el piso y en el lugar donde debían estar sus orejas, se encontraban dos orejas puntiagudas de zorro.
Vestía un ceñido vestido de aventurera hecho enteramente de cuero, incluso las zonas unidas estaban hechas de largas tiras de cuero grueso, lo cual permitía entrever líneas de piel siendo expuestas.
En la mano izquierda sostenía una copa llena de vino, en la otra sostenía dos esferas de cuero que giraba de manera continua con el punto en que chocaban como el eje de rotación.
Su posición frente a una enorme ventana podrían dar la impresión de que estaba viendo la luna, sin embargo, con un poco más de atención, se podía ver una venda blanca que le cubría los ojos.
De repente, rompió el silencio.
—Estaba esperando que te contactaras conmigo. — dijo mientras acercaba la copa a la boca para beber un trago.
Una voz le respondió de manera telepática.
—Bien, eso nos ahorrará algo de tiempo, ¿así que ya sabes por lo que he venido?
La mujer-zorro respondió con una sonrisa y agregó:
—¿Quieres saber que ocurrió en Zedal esa madrugada?
—Veo que puedo confiar en ti para esto.
—Bueno, es una forma de agradecerte estas. — dijo la mujer-zorro mientras apuntaba a sus ojos ocultos por vendas.
—Aun cuando lo digas de esa manera…
—No seas aguafiestas, eres un dios después de todo.
No respondió
—No guardes silencio, eso asusta un poco.—dijo la mujer zorro mientras respiraba profundamente.
—No es fácil ser usuario de Kira, más que una selección divina, parece una maldición. —decía… mentalmente hablando.
—Aun así, esta maldición me ha ayudado a ayudar a muchas personas alrededor del mundo; ¿Sabías que en el territorio humano me llaman <<La protectora>>?
—¿Es eso así?
—Así es, así que espero que no te sientas mal, más bien deberías congraciarte, tus planes están saliendo bien poco a poco. —dijo mientras elevaba la copa de vino hacia el espacio vacío.
El dios guardó silencio.
—Además, quieres saber si ese pequeño experimento tuyo rindió frutos ¿No?
—Aunque lo digas de esa forma…
—Además, me alegra saber que puedo ser de ayuda para el deseo de los dioses de traer paz al mundo.
—¡Hey!, Villeta Salem… ¿Piensas que estamos tomando el camino correcto?”
—Por lo que me has dicho, tanto tú como los dioses de los humanos y los demonios han estado buscando características especiales en sus elegidos; el cambio me parece correcto en tanto se corrijan los errores posteriores. No soy dios para saber qué consecuencias habrá tras esos actos, pero espero que no sean malas.
—Ni siquiera los dioses podríamos saber cuál es el resultado, el único que lo sabe es el protector de los registros de Akasha; ese es el motivo que nos hace tan complicado lograr la paz.
—No te menosprecies, desde mi punto de vista, puedo señalar grandes aciertos en sus decisiones, tanto Dan-Quiel como Kimizu Ouki, Aozora Tenshi, Rizume Yoru, Fangus, Floria, Lizeth y los otros son pequeños pasos que nos acercan a esa paz que los dioses anhelan.
—¿En serio lo ves de esa manera?— preguntaba en la mente de su interlocutor.
—Lo veo, esa es mi habilidad después de todo. —dijo Villeta mientras se retiraba la venda de los ojos, estos se tiñeron de un color dorado que brillaba con los colores del arcoíris. —Al menos, yo me considero como un acierto por parte de los dioses.
En su respuesta no había ni un atisbo de duda, tampoco había orgullo, esa era una respuesta honesta que venía desde el fondo de su corazón.
Villeta se cubrió los ojos de nuevo con la venda mientras esbozaba una sonrisa amable.
—Yo debo admitir, que quiero que me odies por eso; es mi pecado después de todo.
—Repito, no te menosprecies, además, ¿acaso viniste a lamentar y a pedir perdón?, te lo digo otra vez, si cometes un error, aprende de él y sigue viviendo, inténtalo de nuevo, no te rindas ante la presión de tu orgullo, en cambio, haz que este sea un motor de repuesto… Eso es lo que tienes que hacer.
Nuevamente su respuesta no era arrogante, era amable y sincera.
—De alguna manera me haces sentir patética.
—Eres patética sin lugar a dudas, eres patética y eso es algo que puedo ver claramente; sin embargo, haces las cosas bien.
Guardó silencio, una vez más.
—Bueno, no soy quien para reprocharle eso a un dios, así que me apuraré y te contaré lo que ocurrió.
—Antes de eso…
—¿Si?
—¿Qué fue lo que hiciste hace un rato cuando te quitaste la venda?
—Ah, eso… pues ayudé a un par de niños humanos que estaban siendo atracados por unos rufianes de poca monta.
—Siento que no me equivoqué contigo. —declaró mentalmente
—Me halagas, pero es de lo poco que soy capaz de hacer en estos momentos.
Villeta respiró profundamente mientras bebía otro trago de vino.
—Bien, debemos continuar con esto… Veamos, esto ocurrió a media noche en la ciudad de los canales…
Parte 5
Medianoche, sábado, Ciudad de los canales.
En una ciudad que parecía meditabunda en la oscuridad de la noche, el mundo se vio repentinamente obligado a despertarse. Una avanzada de soldados humanos se había aprovechado de la oscuridad de la noche para hacer un ataque a los desprevenidos habitantes de la ciudad.
Lo primero que despertó a todo el mundo, fue una gran explosión en las puertas de la ciudad.
En el momento de la explosión, en algún lugar, una mujer llamada Villeta miraba el ascenso lento de la noche mientras se abstraía a los eventos.
En ese mismo momento, en otro lugar, un joven humano de 17 años se ocultaba de la luz solar en medio de una biblioteca mientras escuchaba una extraña maquinaria.
En ese mismo momento, en la Ciudad de los canales, un esclavo humano y su dueño demi-humano fueron despertados por el ruido de la explosión.
En ese mismo momento, en algún lugar del sur, un joven llamado Fangus sellaba unas cartas.
En ese mismo momento, en algún lugar de las estrellas, tres dioses se sentaban frente a frente sin cruzar una sola palabra.
Entonces, Villeta observó.
La gran explosión generada en la entrada de la ciudad de medio millón de habitantes señaló el comienzo del ataque.
Una vez se escuchó, una tropa de piqueros y espadachines de vanguardia, liderados por Hikari Hina, que sumaban unos 5,000 hombres, se lanzaron desde el frente, atravesando la puerta oeste y dirigiendo los ataques hacia el suroeste, su objetivo era sellar la salida hacia el centro del país.
Al mismo tiempo, una tropa de 500 soldados de caballería, liderados por Aozora Tenshi, realizó un asalto desde la parte norte de la ciudad, su objetivo era recuperar con vida al decimoctavo héroe invocado.
En la retaguardia del grupo de lanceros, un grupo de soldados con habilidades médicas estableció y resguardó un punto médico, mientras una tropa de baja velocidad de soldados se encargaba de dirigirse hacia el centro de la ciudad.
Todos juntos, formaban un ejército de cerca de diez mil soldados.
La Ciudad de los canales estaba desprotegida.
Lo único que podían hacer los habitantes era huir o defenderse como mejor pudieran, aun así se enfrentaban a un ejército organizado.
Sin embargo, nadie gritó ni se defendió.
Las casas de los nobles poseían unos túneles de emergencia que podían dar a varios lugares de la ciudad y fuera de ella.
A través de estos túneles, todas las familias nobles escaparon, menos una.
La familia Von Henrius se encargó de realizar de la mejor manera posible la evacuación de los civiles.
Los Von Henrius se encargaban de la alcaldía de la ciudad, de la planeación municipal y de los sistemas de riesgo y medidas de emergencia.
La ciudad era una ciudad cercana a la frontera, todos sabían que algún día podía pasar, bajo estas posibilidades, se habían realizado planes de evacuación general.
Los centinelas encargados esa noche habían avistado al ejército humano acercarse; para el momento en que iniciaron el ataque, la ciudad estaba casi completamente vacía, excepto por los encargados de la evacuación, las personas que corrían bajo los túneles y dos personas más.
Uno era un niño demi-humano de cabello rojo y el otro era un esclavo humano de cabello castaño. Ambos estaban acostados aun vestidos sobre una enorme cama y bajo lo que parecía ser el cielo estrellado. Y cuando trataban de averiguar lo que pasaba, una enorme explosión sacudió el suelo de la ciudad.
Parte 6 omake, mapa.
En este mapa hecho por el gran viajero demonio Gillmist III, se puede ver la división política del mundo.
La zona roja corresponde al territorio demonio.
La zona café, corresponde al territorio humano.
La zona violeta pertenece al territorio demi-humano.
Ya deben saber, pero cada demonio escogido por el rey demonio es un rey demonio que rige sobre uno de los 8 distritos y la capital.
Según avance la historia van a haber más y más omakes que señalarán lo grande que es en realidad este mundo.
Por cierto, hay una cordillera que atraviesa el continente, desde el sur, entre Aqua del sur y Norkus, por en medio de Lotos y Kalios, Magnolia y Vento cauro, termina justo donde Sin-frank pasa a ser Agaressen.
Esto quizá no les importe, pero la cordillera también se puede continuar entre Querberus y Quibnus (Sur).
Lotos, Magnolia, son dos flores que me gustan mucho XD…
[1]Hikari Hina: (光 雛) hikari de luz y hina de no sé qué :v…
[2] A esto se llama meter muchos personajes nuevos en un solo capitulo
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